25 de enero de 2020

Centro Cultural Calmecac, un rincón para el arte en Iztapalapa.



 

Iztapalapa era un vergel en la época prehispánica, no sólo por estar rodeada de canales, árboles, flores y aves; sino por las artes y oficios que aquí se desarrollaban, como la música, la poesía, la danza y otras actividades que a la fecha sobreviven en algunos rincones de la alcaldía más poblada de la Ciudad de México. Este es el caso del Centro Cultural Calmecac, ubicado en la ladera de la sierra Santa Catarina, en la colonia Miravalle. Aquí, hace más de una década, varios jóvenes del colectivo Asamblea Comunitaria Miravalle transformaron un lote baldío en un espacio creativo para niños y jóvenes principalmente.

 


Oscar Pérez, es un filósofo nativo de este barrio que mantiene vivas las actividades artísticas del centro cultural a través del proyecto mural de su fachada. En un inicio, el grafitero Said Dockins invitó a la artista británica Carrie Reichardt a colaborar para intervenir la fachada del centro con un mosaico. Así inició este proyecto, que a la fecha continúa con la colaboración de artistas internacionales y cientos de participantes del taller de mosaico artístico que se ha impartido desde hace varios años, en este lugar.





El mosaico está hecho con fragmentos de cerámica, vidrio, piedras y platos rotos, objetos reciclados y piezas adquiridas especialmente para ciertas partes del muro. El tema alude a algunos dioses prehispánicos que se fusionan con frases y detalles políticos e históricos, como Emiliano Zapata, el Ché Guevara o el número 43, en memoria de los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa. De izquierda a derecha, en la cara norte se observa a Chalchitlicue, la diosa mexica del agua, de la que emana un río en donde se lee la frase “Los derechos no se mendigan, se arrebatan”.


La entrada está enmarcada por el nombre del centro CALMECAC y de cada lado del marco de la puerta, lo que parece representar la dualidad del Tlalocan y el Mictlan, el agua y la tierra, el aire y el fuego. El Tlalolocan era un lugar mítico, un camino inundado bajo la tierra, donde iban los que morían ahogados. Era el lugar paradisiaco regido por Tláloc, dios de la lluvia y el rayo, habitado también por los Tlaloques. El Mictlán era el inframundo, en donde habitaba Mictlantecuhtli, el dios de la muerte mexica representado en el extremo sur del mural.





El calmécac era la escuela a la que acudían los hijos de la nobleza mexica. De acuerdo con el arqueólogo Enrique Vela, esta escuela ancestral semejaba a un templo y también estaba relacionada con un dios patrono. Si los niños que asistían al calmécac no cumplían con todas sus obligaciones, tenían el riesgo de hacer enojar a los dioses. Algunas de las actividades que se llevaban a cabo en estos templos-escuela era el de levantarse al alba y subir el cerro para ofrecer copal o punzarse algunas partes del cuerpo para ofrendar su sangre; además de entrenar como guerreros y recibir lecciones de astronomía, metalurgia, escultura, carpintería y plumaria.


Dentro de las actividades que actualmente se realizan en este centro cultural, Oscar en colaboración con la artista francesa Claudia Labarrère imparten el taller de mosaico artístico para completar el diseño del mural con un Quetzalcóatl. El taller estará disponible de hasta el 15 de febrero, con entrada libre para todos aquellos que quieran aprender la técnica y colaborar con esta pieza colectiva. Para más información pueden escribir al correo oskarperez@gmail.com
















Descubre toda la cultura de México

En el otoño de 2023, en las profundidades de una cueva desconocida en la sierra de Guerrero
23 de abril de 2025
La cueva de Tlayócoc —ubicada cerca de Carrizal de Bravo, comunidad enclavada en la sierra de Guerrero— fue el escenario de un hallazgo que trastoca las fronteras entre naturaleza, arte y espiritualidad. El joven guía Adrián Beltrán Dimas acompañó a la espeleóloga rusa Yekaterina Katiya Pavlova, quien ha mapeado el subsuelo guerrerense por años, a lo profundo de una formación ya explorada. Pero esta vez, decidieron cruzar un pasaje sumergido... y llegaron a otra sala. Allí, el tiempo se detuvo: dos brazaletes de concha con grabados ceremoniales descansaban sobre estalagmitas cuidadosamente intervenidas en época prehispánica. A su alrededor: una concha de caracol gigante, discos de piedra negra —posiblemente espejos rituales—, fragmentos y ceniza. Todo permanecía como si alguien, hace siglos, lo hubiera dejado para ser encontrado justo ahora.
Un altar en Tikal reescribe la historia de los lazos entre mayas y teotihuacanos
10 de abril de 2025
En las entrañas de la selva guatemalteca, arqueólogos descubren un altar de estilo teotihuacano en Tikal. Más que una pieza ceremonial, es una clave silenciosa de los lazos entre dos grandes civilizaciones: la maya y la del altiplano central.
18 de noviembre de 2024
Un Centro Prehispánico y su Legado Astronómico en Puebla
por Rizoma 13 de octubre de 2023
Este 14 de octubre, México tendrá el privilegio de atestiguar un espectacular evento cósmico: un eclipse anular de Sol.
Haz Rizoma Observación Consciente
por Rizoma 21 de julio de 2023
Los procesos y la obra del arquitecto y artista mexicano Alejandro Delgado se destacan como una puerta hacia la imaginación y la creatividad
por Rizoma 24 de mayo de 2023
Procesos que toman sus propias decisiones como la cianotipia son los que retoma la fotógrafa mexicana Alejandra Barragán
por Rizoma 12 de abril de 2023
El Monumento 9 es una escultura de piedra tallada que forma parte del sitio arqueológico de Chalcatzingo
por Rizoma 4 de abril de 2023
La Pasión de Cristo en Iztapalapa es una manifestación cultural y religiosa de gran importancia histórica y antropológica
Haz Alineación Planteraria
por Rizoma 28 de marzo de 2023
Una alineación planetaria se produce cuando varios planetas se alinean en el mismo plano en el cielo nocturno